Se elige al gobernante viendo en él su simpatía, sus promesas y la seguridad de que cumplirá. El compromiso político es con el pueblo y no con los intereses que lleve en su morral.
Noviembre 15 de 2024.
Tres años de gobierno. Hay proyecto político según el discurso oficial, pero no hay obra. Tres años que parecen pocos, pero para el pueblo es una eternidad cuando no hay respuestas a los compromisos de campaña.
Promesas que se hicieron viejas y que seguro ya no se podrán realizar. Muchos votos fueron los que el Gobernador recibió para dirigir Sinaloa, pero parece que ese número sin precedentes en la votación sinaloense estimuló la soberbia y el revanchismo político.
Le fue inyectado un poder desmedido por ese voto ciudadano que se está utilizando para perseguir a sus oponentes políticos. No se instalaba adecuadamente el gobierno y las diferencias políticas empezaron a aflorar. Mazatlán y Culiacán fueron las primeras cargadas que derrumbaron a sus Presidentes Municipales y no conformes con sacarlos, también los llevaron a la silla de los acusados tachándolos de delincuentes.
Los jueces locales bajo el control del Ejecutivo, se encargaron de vincularlos a proceso y los removieron de sus cargos municipales. El poder de la ley quedó al amparo del Ejecutivo y solo fue cuestión de ordenar para que la guillotina política se pusiera en acción.
No conforme con lo ocurrido en esos municipios, giró la mirilla vengativa y la enfocó contra antes su amigo, después su adversario político, el Mtro. Héctor Melesio Cuén Ojeda. Vivieron una disputa acalorada hasta que sorpresivamente surge una mano asesina y lo priva de la vida.
No conforme con las rivalidades que estaba creando, cargó después contra la Universidad Autónoma de Sinaloa. Advirtió a su Rector que si no cumplía con lo que le ordenara, se atuviera a las consecuencias. Pretendió imponer la Ley de Educación Superior para que se le aplicara a la UAS aun cuando sabía que eran inconstitucionales algunas de sus normativas. El Rector se negó y la rechazó, ese desafío lo hizo enfrentar la furia política del gobernante. También vengativamente fue removido de su cargo rectoral.
¿En qué momento ha gobernado el Dr. Rubén Rocha Moya a Sinaloa? Ha vivido enfrascado en conflictos que lo han desgastado políticamente. El odio y la revancha han sido sus mejores aliados. Sus asesores lo han llevado por el camino equivocado.
Por ese motivo, surge la pregunta obligada, ¿cuál ha sido la transformación de Sinaloa y la rentabilidad del gobierno del Dr. Rocha Moya? El inconveniente político del gobernante, no han sido los enfrentamientos políticos que lo tienen muy debilitado, su proceder belicoso ha sido la sorpresa para muchos. No debió en ningún momento confrontarse contra la Universidad Autónoma de Sinaloa.
La UAS lo ha exhibido en sentencias judiciales en las que los dirigentes universitarios han demostrado que no han cometido ningún delito y que la persecución en su contra, es política y revanchista. Ha quedado probada la manipulación de instancias estatales represivas como la Fiscalía y la Auditoría Superior del Estado, sin omitir la complicidad del poder judicial. Convirtiéndose en una fábrica de delitos y solapando el daño causado a la Institución Rosalina y a sus dirigentes.
Los primeros tres años han sido de angustias, temor y decepciones ciudadanas. No solo le han consumido demasiado tiempo para realizar acciones de gobierno en favor de los sinaloenses. No salía de los descalabros impuestos por la UAS cuando ocurre una traición y un homicidio. La situación social y política de Culiacán y Sinaloa dio un vuelco que tiene al borde del abismo al gobierno y a la sociedad.
La traición a Ismael Zambada García, “El Mayo Zambada”, líder del Cártel del Pacífico y ahora preso en los Estados Unidos y el homicidio del Mtro. Héctor Melecio Cuén Ojeda. En los hechos, apareció una carta que lastima de manera peligrosa la investidura política del Gobernador.
Sinaloa sufre una peste criminal que ha costado muchas vidas, desaparecidos y robos de vehículos que han registrado cifras que causan terror al solo conocerlas. Sinaloa y su gobierno, están en la mira preocupante de la Presidencia de la República. Las condiciones políticas del gobierno no tienen opinión favorable en el ánimo de la presidenta Sheinbaum Pardo.
¿Cuál será la estrategia política que aparezca como tabla de salvación a un gobierno que naufraga? Lo cierto es que la orientación al gobernante por sus asesores no ha sido la más afortunada. No debió enfrentar a la Universidad Autónoma de Sinaloa, su tradición de lucha históricamente ha sido y es, su defensa natural. Conviene buscar soluciones con inteligencia y desterrando odios y rencores. Por ello la pregunta: ¿Qué se informará a los sinaloenses?
La UAS no se toca, la autonomía universitaria se respeta.