El elevado riesgo de contagio de esta nueva cepa del COVID-19 pone en estado de alerta a las familias sinaloenses porque no hay seguridad en las escuelas que aseguren el mínimo de seguridad para que la pandemia no se propague.

Los centros educativos en su gran mayoría se encuentran vandalizados. No cuentan en muchos casos con agua potable, energía eléctrica, ventanas destrozadas, sanitarios defectuosos y un gran número se encuentran enmontados. No se ha cumplido en orientar adecuadamente para que los alumnos lleven gel, cubrebocas y sepan guardar la sana distancia ¿Es conveniente un regreso presencial a clases?

Las condiciones del regreso son tan nebulosas que hay mucha incertidumbre en los Padres de Familia duda un gran número todavía si mandan o no a sus hijos a la escuela.

La salud no está sujeta a decisiones por decreto. La salud y la vida de sus hijos está en juego. Hace una semana, el semáforo epidemiológico le marcaba rojo a Sinaloa y una semana después la luz roja se la cambian al amarillo.
Está en riesgo la salud de niños y niñas, pero también la de los Maestros y las familias de los que asistan a la escuela. Los enfermos siguen manteniendo cifras alarmantes y las muertes ya no respetan edades. Las autoridades deberían ser más responsables en la aplicación de este tipo de medidas.

No se ha avanzado mucho en la aplicación de la vacuna, las autoridades de salud no han sido claras en las cifras que difunden. Seguro que en el Estado se llevará alrededor de una tercera parte de su población con la aplicación de la dosis completa de la vacuna.

¿Aun así, se atreven a abarrotar las escuelas sin importar los elevados riesgos que ello representa?

Es muy objetiva la información del dirigente estatal del Partido Sinaloense, Héctor Melesio Cuén Ojeda, y que la comparto en todo, al invitar a la población que analice la conveniencia del regreso a clases anunciado y los riesgos que ello representa. No hay condiciones seguras en lo material y tampoco en los comportamientos que deberán
asumir de manera responsable todos los actores que concurran a esa dinámica escolar.

La autoridad Estatal de salud da cifras diarias de enfermos y muertes ocasionadas por el covid, pero son muy confusas. Solo registran las que se atienden en establecimientos públicos de salud, pero no dicen de otros pacientes que ingresan a clínicas privadas o que se encuentran atendiéndose en sus domicilios.

El problema sigue siendo serio y se acerca la fecha anunciada. El SNTE cedió a la presión que en su contra ejerció el gobierno federal. La corrupción en la que ha venido nadando por años, ha sido tan aberrante que no tienen autoridad moral ni legal para oponerse. Primero anunciaron su oposición y después, sin ningún rubor, se desdijeron.

¿Como se desarrollará la estrategia educativa? Niños que irán y muchos otros que no lo harán. ¿Qué pasará con los Padres de familia ante una situación donde no habrá información que los oriente y menos que les resuelva sus temores?

¿Las aulas serán suficientes para que la asistencia de los niños a la escuela guarde la sana distancia? No olvidemos que en México la educación pública es masificada, el número de alumnos por aula y por maestro, en muchos casos se encuentra rebasado.

¿Aun así, habrá organización adecuada y segura para prevenir que no se catapulte la enfermedad?

Las condiciones para un regreso presencial a clases en estos momentos no es lo más recomendable. Es cierto que reforzar la educación en los niños es un imperativo. ¿Pero reitero, usted está convencido o convencida de mandar a sus hijos a clases?

¿Usted qué opina?