Durante las primeras semanas, las pérdidas ascendían a 600 millones de pesos, sin embargo, tras 40 días de violencia imparable, los números han ido en aumento.
En los principales municipios afectados por la violencia que se ha venido presentando desde el 9 de septiembre, como Culiacán, Navolato y Elota, el sector comercial ha reportado pérdidas económicas por los 13 mil millones de pesos, esto debido al cierre de varios negocios y las ventas tan bajas provocadas por la violencia e inseguridad.
Por lo menos 120 negocios han cerrado de forma definitiva o provisional tan sólo en el centro de Culiacán.
El sector comercial de Culiacán, Navolato y Elota ha registrado pérdidas de 13 mil millones de pesos debido a la violencia e inseguridad
Las afectaciones económicas en las primeras semanas ascendían a alrededor de 600 millones de pesos, pero con más de un mes de cierres, las pérdidas ya suman 13 mil millones entre los municipios de Navolato, Elota y Culiacán”, afirmó Óscar Sánchez Beltrán, presidente de la Unión de Locatarios del Centro de Culiacán.
Derivado de la crisis económica, comerciantes afirmaron que no destinaron recursos para las festividades de Halloween y Día de Muertos.
Las pérdidas durante más de un mes de violencia han superado a las pérdidas por la pandemia derivado del Covid-19, ya que aparte de no haber ventas, tampoco hay seguridad para la ciudadanía ni comerciantes.
Sánchez Beltrán explicó que aproximadamente 120 negocios han cerrado de forma definitiva o provisional en el centro de la ciudad debido a la violencia, que ya ha paralizado el sector económico por más de 40 días.
“Aunque ha aumentado la afluencia de usuarios en centros comerciales, las ventas no han mejorado. La reactivación de muchos planteles escolares ayudó a la circulación de personas, pero el temor de la población de estar en la calle y de los propios comerciantes sigue presente. Las ventas han caído hasta un 70 por ciento”, señaló.
El también comerciante de ropa y bisutería exigió el regreso de elementos de seguridad municipal a las calles de Sinaloa.
Ante esta situación, Laura Alicia Quevedo Pérez, líder del comercio ambulante en el centro de Culiacán, informó que las ventas han disminuido hasta en un 80 por ciento, especialmente en tiendas de ropa, bisutería y otros productos no esenciales.
“Esta narcopandemia nos dejó en una situación muy precaria. Solo estamos ganando lo justo para comer; se nos está acabando la mercancía, lo que vendemos nos lo comemos”, comentó Quevedo Pérez.
Agregó que la crisis ha generado temor de perder lo invertido, por lo que los comerciantes no destinaron recursos para las festividades de Halloween y Día de Muertos. Además, señaló que los 50 mil pesos invertidos por negocio para las celebraciones del 15 de septiembre no generaron ninguna ganancia debido a la violencia que persiste en Culiacán.
Quevedo Pérez concluyó que la situación es peor que la pandemia de Covid-19, ya que no solo no hay ventas, sino que tampoco hay seguridad para la ciudadanía ni para los comerciantes.