Julio Cesar Urías y el síndrome Fernando Valenzuela, con los Dodgers de los Angeles
= Lanzó gran juego; pero perdió 2-0 ante SFG
= Ahora marcha con record de 3-6
= Su porcentaje en CLA es de 2. 80, sin embargo
= Tres lanzadores de TC en el Juego de Estrellas de LMB
= Manny Barreda, en sólida campaña con Potros de Tijuana
Jorge Luis Telles Salazar
Por lo menos tres pitchers que en invierno defienden la franela de Tomateros de Culiacán, participarán en el Juego de Estrellas de la Liga Mexicana de Beisbol, que se desarrollará el domingo 19 de los corrientes en el estadio de Monclova, de conformidad con el formato tradicional: selección Norte contra el Sur.
En el team norteño pasarán lista de presentes: Sam Dyson, recientemente adquirido por el club local y el veteranísimo Oliver Pérez, ya en temporada de despedida como activo del beisbol profesional mexicano; los dos, son parte de los Toros de Tijuana.
En el equipo del sur, el joven velocista David Gutiérrez López, que milita con los Leones de Yucatán.
Los tres convocados, hay que decirlo, llegan al Juego de Estrellas del circuito de verano, por méritos propios e indiscutibles. Sam Dyson, por ejemplo, marcha con números parejos de 2-2, un 3.06 en efectividad y 18 ponches a lo largo del torneo; Oliver Pérez, a su vez, registra 15 salidas, con un 1.00 de whip y promedia 11 chocolates por cada 9 entradas lanzadas; David Gutiérrez, por su parte, marca 2. 45 en carreras limpias admitidas, 0.93 de whip, 2 bases por bolas y 15 ponches, en 18 episodios y un tercio de trabajo monticular.
Casi un hecho que los tres estarán en acción el próximo domingo, en el mero día del Padre. Tendremos un buen pretexto para ver televisión.
¿No?
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A propósito de pitcheo.
Ayer domingo, frente a los Gigantes de San Francisco, Julio Cesar Urías volvió a lanzar un gran partido; pero, como si fuese una maldición, los Dodgers no batearon y perdieron por blanqueada de 2 carreras contra 0. Fue la sexta derrota para el de La Higuerita, Culiacán, a cambio de solo tres victorias. Panorama diferente a lo que veíamos el año pasado por estos días.
Y bueno, uno pudiera pensar en una mala temporada para Urías; pero la verdad que no es tanto. Su promedio es de 2. 80 en carreras limpias admitidas, con un whip de 1. 06 y 56 ponches en 64 entradas y un tercio lanzadas.
Hace un año, minimizaban su record en juegos ganados y perdidos, por un porcentaje en carreras limpias admitidas por encima de 3. 00. Ahora le critican por sus juegos ganados y perdidos. En fin.
Lo cierto es que coincidentemente con lo que acontecía con Fernando Valenzuela en la década de los ochentas, Julio Urías recibe escaso apoyo ofensivo de sus compañeros y a veces hasta defensivo, cada vez que está sobre el centro del diamante. Decir que esto no es casualidad sería digno de un villamelón; pero la coincidencia ahí está. Lista para el análisis.
Ayer domingo, Urías abrió contra los Gigantes y en la misma primera entrada le conectaron par de cuadrangulares para colocarlo, 2-0, contra el paredón. Sin embargo, después del segundo leñazo de vuelta entera, Julio Cesar retiró a 16 bateadores en rigurosa fila india y terminó por sacar out a 17 de los últimos 18 peloteros a los que hizo frente, con un total de 10 humeantes chocolates. Lamentablemente sus coequiperos le volvieron a fallar y eso sentenció su descalabro.
Julio, la verdad, ha sido un pitcher de contrastes a lo largo de la temporada actual; pero sus últimas salidas permiten presagiar que se recuperará pronto. Si bien se ve casi imposible que logre los números del año pasado en ganados y perdidos, apostamos a que cerrará campaña con números positivos, allá por septiembre venidero.
Doble contra sencillo.
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Por cierto.
Quien vuelve a generar sólidas expectativas es Manny Barreda, en una muy buena temporada con los Potros de Tijuana, después de un titubeante comienzo en la actual campaña de la Liga Mexicana de Beisbol.
Barreda suma ya tres victorias sin derrota en sus ultimas cuatro salidas y esto es un buen presagio para los aficionados de Tomateros de Culiacán.
En esta última aparición, frente a los Olmecas de Tabasco, el Manny lanzó por espacio de cinco innings, lapso en el que solo admitió 2 hits y una carrera. Quien le auxilió en el primer relevo, a propósito, fue Oliver Pérez, otro de los muchos estelares que tienen los Potros de Tijuana en sus filas.
Ahora, para calibrar la recuperación de Barreda, déjeme decirle que en estas últimas cuatro apariciones sobre el centro del diamante, va con marca de 3-0, 1. 63 en carreras limpias admitidas y 0.77 de whip. Excelente.
Y bueno, también merece comentario aparte el chamaco Juan Pablo López, que ya ve acción regularmente con Ashville, sucursal de los Astros de Houston en clase A avanzada. Desde su debut, luego de superar problemas en su brazo de lanzar, ha pitcheado 7 episodios, en los que ha aceptado 5 imparables, con 10 chocolates y solo 1 base por bolas.
Juan Pablo posiblemente es el mejor novato para Tomateros de Culiacán, a quien también ya veremos con una frecuencia mayor, a partir de la próxima temporada de la Liga Arco Mexicana del Pacífico.
Pendientes.
