LO DIJO MONTOYA: VALE MÁS UNA GRACIOSA HUIDA QUE UNA APASIONADA ENTREGA


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VALE MÁS UNA GRACIOSA HUIDA QUE UNA APASIONADA ENTREGA.

Por: Roberto Montoya Martínez

La tijera en Televisa anda implacable, y no es para menos, no les alcanzan los vivos para enterrar a los muertos. Producto de la austeridad republicana, hubo que sacrificar algunas exclusividades, dado que no son costeables.

Tal es el caso que nos ocupa en esta ocasión., Una personalidad de internet que no dio el ancho en la televisora, tuvo que ser pasada por las armas, pues no resultó ser lo que la empresa esperaba, aunado a que la tele nunca fue su medio.

Lo bueno es que esta persona tomó con filosofía este golpe de realidad. Échense este trompo al’ uña.

Wendy Guevara se va de Televisa con cajas destempladas, pues no recibirá más la jugosa beca mensual, la cual cobraba puntualmente. La influencer guanajuatense seguirá en la empresa como agente libre, es decir, que trabajará por proyecto.

Sin embargo, ella tiene otras metas. Desea tener una serie en Netflix, amén de volverse a encontrar con sus amigas LAS PERDIDAS, para reactivar sus plataformas digitales y recuperar parte del fandom perdido.

La ganadora de la primera temporada de LA CASA DE LOS BABOSOS, perdón, FAMOSOS, agradeció a la empresa la oportunidad, y quedaron como amigos, dejando la puerta abierta por si se ofrece.

El ser agradecido es de gente noble. Eso es Wendy, que está más que impuesta a las duras que a las maduras. Ahora que ya se zafó del yugo que la ataba a Televisa, podrá hacer lo que quiera, como quiera y cuando quiera, pero, sobre todo, volverá a ser lo que antes era: dicharachera, espontánea y divertida.

Fue mejor una graciosa huida que una apasionada entrega. Hablando en plata, Wendy Guevara nunca fue producto para la televisión abierta. Su personalidad abigarrada contrastaba con lo que Televisa quería hacer con ella.

Por suerte o por desgracia, todos sus proyectos fracasaron, amén de que se negó a participar en telenovelas porque no tiene la formación necesaria para salir en un culebrón.

Lo bueno es que, hasta el final, Wendy fue sincera. Al perder a la influencer, Televisa salió ganando, pues se ahorró un billetote en pagarle a alguien cuyo nicho está en las plataformas digitales. Al final, La perdida fue otra más que mordió el polvo.


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