LOS MARIACHIS CALLARON
Por: Roberto Montoya Martínez
Noviembre 21 de 2024.
La música mexicana vuelve a cubrirse con el negro crespón del luto. Se ha ido uno de los mejores arreglistas que dio un toque de elegancia a la canción vernácula.
Comenzó como violinista, y terminó trabajando con artistas de la talla de Vicente Fernández, Aída Cuevas, Lucha Villa y Alberto Angel “El Cuervo” entre otros. Participó en diversos festivales de la canción ranchera, tanto como arreglista como compositor.
Un músico querido y respetado en todo el gremio. Recordemos juntos con la fuerza del corazón, la trayectoria del maestro Rigoberto Alfaro.
Rigoberto Alfaro Rodríguez, nació en Yurécuaro el 1º de noviembre de 1934. Sus padres fueron Esperanza Rodríguez Ochoa y José Guadalupe Alfaro Trujillo quien le dio las primeras lecciones musicales y lo llevó con la maestra Rosenda Arellano para que le impartiera las enseñanzas gramaticales. Por necesidades de la vida, cuando Rigoberto contaba con 8 años de edad, la familia emigró a la ciudad de Nuevo Laredo, Tamaulipas donde Rigoberto tuvo que trabajar para ayudar con los gastos familiares.
Consiguió un cajón y recorrió las calles de la ciudad dando grasa a los zapatos. Muchos años después, cuando ya era un consumado músico, un amigo le dijo: “quien dijera que un gran cancionero, comenzó siendo bolero”. Posteriormente, la familia se trasladó a la ciudad de México donde Rigoberto, que apenas contaba con 11 años, empezó a acompañar a su papá cantando en restaurantes y cantinas.
Un tiempo después, Don Guadalupe formó parte del Mariachi Arandense y Rigoberto participó como guitarrista, pero con ciertas carencias en conocimientos musicales; es por ello que toma la determinación de estudiar de manera formal y se inscribe en la Escuela Libre de Música y Declamación.
Una vez que afianzó sus bases musicales y debido a su calidad interpretativa, Rigoberto fue invitado a participar en varios de los mariachis más prestigiosos de ese tiempo, con los cuales siempre demostró su profesionalismo, lo cual también le abrió las puertas de otro de sus sueños: formar parte del mejor grupo folklórico que existía: el Mariachi Vargas de Tecalitlán. Su ingreso a esta agrupación se formalizó a instancias del compositor Rubén Fuentes, gran amigo de Rigoberto, quien lo recomendó ampliamente con Don Silvestre Vargas.
Su vida profesional y de trabajo creativo a lo largo de más de 60 años.
Rigoberto Alfaro se desempeñó en varios campos de las artes musicales: intérprete, guitarrista, compositor, arreglista, productor de obras, director artístico y maestro de música. Como compositor, ha logrado crear más de 60 obras, muchas de ellas grabadas por artistas famosos. De estas composiciones, guarda especial cariño por: Quisiera olvidarme de ti, La fuente (música instrumental) y Soy de puro Michoacán.
Como arreglista, Rigoberto, fue quizás más conocido ya que ha impulsado al éxito a grandes artistas entre los que sobresalen: Juan Gabriel, Lola Beltrán, Vicente Fernández, Antonio y Pepe Aguilar, Rocío Durcal y el inolvidable José Alfredo Jiménez, de quien Rigoberto guarda con cariño una dedicatoria que le hizo: “Para Rigo mi sincero recuerdo y gracias por tantos arreglos tan bonitos que han adornado mis canciones”. Sinceramente, José A. Jiménez”.
Rigoberto explicó en alguna entrevista que la labor del “arreglista” consiste en transformar las canciones que entregan los compositores y que son como diamantes “en bruto”. La canción es preparada y “vestida” por el arreglista para que todos los instrumentos musicales hagan su entrada y participación adecuada, produciendo una sinfonía que le guste al público; sin estos arreglos, puede que las canciones no pasen de la regadera, es decir, “ser cantadas solo cuando se baña el que la compone”.
Rigoberto también se ha desempeñado como “Director artístico” en las compañías disqueras. A grandes rasgos, su trabajo consiste en: recibir todas las composiciones que llevan los creadores, ya sea en un cassette o en disco compacto. Después selecciona los temas que tienen cierta calidad artística y que son adecuados para los artistas que colaboran en la firma disquera.
Posteriormente, encarga los arreglos musicales y coordina las actividades de la orquesta y mariachis para acompañar a los artistas cuando se hacen las grabaciones. También fungió como director artístico en programas famosos de radio y televisión como: Siempre en domingo, Noches tapatías, Este México Nuestro, Estampas de México, entre varios más. Adicionalmente, y debido a su fervor religioso, fue director artístico que más estiman los cantantes famosos que año con año llevan las tradicionales Mañanitas a la Virgen de Guadalupe en su basílica. Quien tuvo la suerte de ver a Rigoberto junto a los artistas, puede constatar ese gran cariño que le profesan todos y baste comentar aquí que Vicente Fernández siempre presume ser compadre de Rigo.
A lo largo de su carrera artística, Rigoberto recibió infinidad de premios. Entre los que más guarda con cariño son: en 1982 la Lira de Oro como mejor arreglista, en el 2004, el homenaje en disco del Mariachi Sonidos de América; en 2006, el disco-homenaje del Mariachi Nuevo Tecalitlán y por supuesto, el reconocimiento como Hijo Distinguido de Yurécuaro en 2004.
El afamado arreglista falleció el 20 de noviembre a los 90 años de edad. Hasta el momento, las causas de su muerte no se han dado a conocer, pero se atribuyen a problemas de salud.
Los mariachis callaron. Rigoberto Alfaro ya no dirigirá más los arreglos de las canciones mexicanas. La comunidad artística lamenta la muerte del también productor musical. Aída Cuevas fue la primera en externar su pesar ante el fallecimiento del maestro Alfaro, con quien trabajó en diversas grabaciones.
La Sociedad de Autores y Compositores de México, también externó su pesar ante la partida de quien también realizara diversas composiciones, tanto instrumentales como cantadas.
Nuestra música ha perdido a un gran baluarte, uno de los últimos sobrevivientes de la mejor época de la música nacional, donde sin utilizar el autotune, se podían hacer arreglos impresionantes a las grandes canciones. Buen viaje maestro Alfaro. Y gracias por la música.
POR TODO LO QUE NOS DISTE Y LO QUE EN VIDA FUISTE
MUCHAS GRACIAS RIGOBERTO ALFARO DONDE QUIERA QUE ESTÉS
(1934-2024) Q. E. P. D.