A CHILLAR A OTRA PARTE
No hay plazo que no se cumpla, ni fecha que no se llegue. Se cumplió la profecía. Un
programa de comedia terminó en tragedia por lo patético que era. Todos se tiran la pelota
para ver quien tuvo la culpa, si fue melón o fue sandía. Y quienes vienen al rescate son
nuestro par de guarros consentidos, que acuden al grito de socorro del canal, que se está
hundiendo más que el Titanic en términos de rating. Échense este trompo al’ uña.
NOSOTROS LOS GUAPOS vuelve a la carga a ocupar el espacio que inmerecidamente tenía
el remake del DR. CÁNDIDO PÉREZ. La serie antes citada no la vio ni el mismo elenco de la
serie de tan mala que era. En entregas anteriores les explicamos con peras y manzanas los
agravantes que tenía esta programación protagonizada por Arath de la Torre, que vuelve a
sumar otro fracaso más en su carrera. Para recuperar a sus cuatro fieles televidentes, se
echa mano de la videoteca para volver a poner en rotación la serie NOSOTROS LOS
GUAPOS, dado que su sentido del humor es un poco más actualizado, amén de que
Albertano y el vítor son personajes muy populares y queridos. Esto va más allá de la
maldición que pesa sobre Raquel Bigorra, la cual consta de que proyecto en el que
participa la cubana, proyecto que truena. Seamos francos., ese programa ya estaba
muerto desde un principio, solo que ella le dio el tiro de gracia.
El galeno coquetón se fue a chillar a otra parte. Su consultorio cierra definitivamente para
poner en su lugar la pensión donde el Vítor deja su camión. Es más fácil adaptar una
novela que una comedia, ya que las historias dramáticas pueden amoldarse a X momento
histórico, cosa que no puede suceder con una sitcom. Ojalá que NOSOTROS LOS GUAPOS
logren rescatar a los televidentes que se fueron a ver EXATLÓN o la película de cinco, que
ya han pasado chorrocientas veces, ¿Cuál es? Que importa. Vale más malo por conocido
que bueno por conocer.