EL PAPUCHO DE LAS NOTICIAS 2° PARTE
Por: Roberto Montoya Martínez
Domingo 23 de julio de 2023.
En la entrega pasada, Juan Pablo nos platicó de su fugaz paso en Televisa, dado que fue un casting en vivo, pese a ello, eso le dio buena suerte.
Su paso por la radio le dio las tablas suficientes para desenvolverse en su actual actividad. Dejemos que él nos relate su transición de la radio a la televisión.
HASTA QUE SE ME HIZO
“No se me hizo difícil entrar a la televisión, ya que esa siempre ha sido mi meta. Mi primera incursión en la pantalla chica fue en Megacanal con Chepe Zazueta, eso se dio mientras estaba en Radio Sinaloa.
Estuve la friolera de 6 meses en un programa deportivo, sobra decir el contenido de dicha programación. Transcurridos 8 meses, los mismos que estuve en dicha estación de televisión, recibo la llamada de Paul Villegas.
No podía desatender dicho llamado. Después de todo, hay que ganarse la vida. El me invitó a trabajar a TV Azteca, ya que había una vacante de reportero, y mi pregunta de entonces era -¿Qué vio en mi para hacerme tal ofrecimiento?- Si yo era hasta ese momento locutor de radio y comentarista deportivo.
Estaba muy verde en todo lo relacionado al área de noticias. Sin meditarlo, acepté, después de todo era chamba, y no era cuestión de despreciarla. Le agradezco a Paul su voto de confianza y el haberme iniciado en el periodismo duro.
De él aprendí mucho mientras fuimos compañeros de trabajo. Para que ve a que todo tiene un punto de partida, previo a su llamada y a lo que le comenté anteriormente, la televisora del Ajusco, particularmente su filial en Culiacán, impartió un curso de conducción denominado MEDIA 13, donde varios compañeros de clase y yo participamos, con la esperanza de algún día incursionar en los medios y entrar por la puerta grande.
Ahí conocí a Paul, y producto de esa amistad en ciernes vino la llamada que, prácticamente cambió mi vida. Eso fue en agosto de 2016, un mes muy importante para mí, ya que justo en el octavo mes del año me suceden cosas maravillosas.
Tras esa llamada y una entrevista directa, escuché las palabras que cualquier persona con avidez de crecimiento profesional y económico desea siempre oír: El trabajo es tuyo. A partir de agosto de 2016 y hasta mi salida, punto en el que ahondaré más adelante, comencé a escribir mi historia en Azteca Noticias”.
CAMBIO DE GIRO
“Al entrar al canal, Paul me dijo –Tú cubrirás todo lo relacionado con la nota roja- y mi pregunta fue -¿Cómo le hago? No conozco a nadie- Tras unas cuantas llamadas, y rodearme de las personas adecuadas comencé mi labor como reportero de nota roja. Afortunadamente tengo el don de saber hacer amigos.
No fue enchílame esta gorda cubrir la nota roja. Se requiere tener agua helada en las venas y nervios de acero para ver cadáveres ensangrentados, cuerpos mutilados, incluso desmembrados, el rostro doliente de las familias ante tan macabro espectáculo. En fin, que cosa tan terrible.
El periodista de a de veras se forma en la calle, y esa fue mi verdadera escuela. Lo que vi en la escuela fue poco comparado con lo que aprendí cubriendo la fuente de política y nota roja.
Lo que sí le agradecí a Azteca es que nadie, absolutamente nadie se queda anquilosado en una fuente en específico. Te dan la libertad de cubrir la fuente que quieras, siempre y cuando genere nota, que es la constante en el periodismo”.
RECUERDOS IMBORRABLES
“Hubo dos hechos que me marcaron profundamente mientras estuve en Azteca: En 2017, a un año de haber entrado a trabajar ahí, se me encomendó irme a radicar a Tabasco por espacio de un mes, debido a problemas de índole administrativo en dicha filial.
La central de la cadena hizo un equipo formado por los corresponsales de las repetidoras y estaciones locales.
Y da la casualidad que me saqué la rifa del tigre, ya que cubrí el terremoto, los dos que hubo en CDMX. Tanto el del 8 de septiembre como el del día 17.
La adrenalina está a mil por hora, andar mal comido, sin dormir durante dos días, trabajar en condiciones deplorables te deja una gran escuela.
Aunque es una experiencia única no es nada envidiable, pues te juegas la vida al cubrir un sismo de catastróficas proporciones como el que me tocó cubrir a mí, con pocos elementos, solo con mi camarógrafo y mi micrófono, yendo a las comunidades a golpe de calcetín para contar las historias de las familias que cayeron en desgracia, es algo que me llevaré hasta la tumba, por lo gratificante que resultó ser para mí. Tras lo anterior, volví a casa a cumplir con mis labores cotidianas.
Un año después el 1 de julio del 2018, se hace otra convocatoria para los corresponsales de las filiales de Azteca, y fui seleccionado para cubrir los comicios electorales que por entonces se celebraban, dicha cobertura fue para el canal a+.
Tuve el privilegio de realizar mi labor en la Ciudad de México, cubriendo las incidencias del proceso electoral más grande de toda la historia, un evento sin parangón alguno.
Por primera vez en más de 100 años de vida democrática, la izquierda asume el mando a nivel nacional, cosa que era impensable.
Fui testigo presencial del triunfo del ahora presidente Andrés Manuel López Obrador, que tras 12 años de lucha sin descanso, ya se le hizo.
Ver los contrastes en dicha jornada, en los que los izquierdistas manifestaban su júbilo, los ahora opositores, tanto de centro como de derecha eran la viva imagen de la derrota, pues el pueblo los castigó con el látigo de su desprecio a través de las urnas.
No me considero juez, mucho menos jurado, pero me atrevo a decir que México, hoy, ya es otro. El efecto Morena también se sintió en Sinaloa, donde le abrieron la puerta a alcaldes de izquierda, siendo que desde siempre nuestro estado fue por mucho tiempo bastión priista.
Estar en la capital, viendo las dos caras de la moneda en ese proceso electoral histórico, fue algo gratificante, pues me topé con periodistas de gran cartel, comunicadores consagrados, todo un mundo de gente que peleaba la nota que se generaba en cualquier momento, visitar los estudios del Ajusco, son cosas que siempre guardaré en mi memoria, y que me motivan a seguir adelante, sin conformarme con menos”.
DE AQUÍ SOY
“Cuando a+ empezó transmisiones hace más de dos años, encabecé el noticiero matutino junto con mi compañera Cynthia López, el cual duró solo un trimestre.
Dicha emisión salió del aire por decisiones de carácter administrativo. Un año después en 2018, se me da la oportunidad de encabezar el noticiero de la noche, en el cual estuve al frente cosa de seis meses.
Ese fue mi primer espacio como titular, liderando una programación. Ahí fue justamente donde refrendé mi propósito, hacer televisión, meta que ya había alcanzado, pero siempre aspirando a más.
Aunque mi tirada siempre fue lo deportivo, mi meta y fin fue siempre ser conducción de televisión. Y creo que no lo hago tan mal”.
Este hombre tiene mucha tela de donde cortar. A manera de dejarlos picados, el papucho de las noticias se fue al WC ¿Al Baño? ¡No! A la Catedral de Winchester. Lean el próximo episodio.