LO DIJO MONTOYA. 15 DE OCTUBRE DE 2021.


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MENTIROSO SIN MEMORIA, PIERDE EL HILO DE LA HISTORIA


Por: Roberto Montoya Martínez

Eugenio Derbez acaba de recibir un golpe a su ego y su vanidad, ya que el pueblo de Acapulco, Guerrero, no lo consideró digno de engalanar sus calles con su horrenda presencia. Este rechazo público tiene un trasfondo político y social. La elite piensa que el pueblo no tiene memoria, y que lo pueden hacer maje con promesas que no está en su mano cumplir. Perdonen que los desmienta, pero están en un error. Los guerrerenses han sido ofendidos, y la única forma de lavar ese oprobio es pagar con la misma moneda a quien los desdeñó después de haber sacado raja de la gente del pueblo, prometiendo el oro y el moro. Si bien dicen que prometer no empobrece, cumplir es lo que aniquila. Échense este trompo al’ uña.

El 9 de octubre se develó una estatua en pleno puerto de Acapulco con la efigie del comediante Eugenio Derbez, quien bajo la promesa de promover al puerto guerrerense a través de la serie que está por estrenar en plataformas digitales, fue acreedor a dicho homenaje en vida.

El pueblo del estado costeño no piensa lo mismo, ya que el señor les vio la cara cuando prometió destinar parte de la taquilla de su celebérrimo churro NO SE ACEPTAN DEVOLUCIONES para mejoras en el puerto, tras el paso de los fenómenos naturales INGRID y MANUEL, promesa que quedó rota.

El pueblo al saberse engañado y defraudado, hizo público su malestar cuando se develó a la sorda esa estatua, cuyo lugar debe ser ocupado por un prócer o mínimo un luchador social, de perdida a Andrés García, quien si promovió al puerto a través de sus películas, no por un gandul que con el dinero del pueblo de México realizó películas que no abonan nada a la cultura popular.

El gobierno del estado, reconocido que cometió un error, piensan seriamente en remover dicha estatua, la cual fue vandalizada por la propia población, que lleno de asco y vergüenza la cubrieron con cinta canela, incluyendo la placa conmemorativa. Lo que fue otra raya más al tigre es que la serie llamada ACAPULCO fue grabada en Puerto Vallarta.

¿Qué cree el señor Derbez? ¿Qué la población de Guerrero es su burla o qué? Este noble estado ha recibido demasiadas ofensas como para que le echen más leña al tercio. Encima de que falta a su palabra, se le premia con una estatua por una serie que ni siquiera fue filmada en Acapulco. Para eso me gustabas Ludovico Peluche. Que desagradable.

Mentiroso sin memoria, pierde el hilo de la historia. Eugenio Derbez no es más que un embustero que se piensa que es un dios y solo mira por su conveniencia. Con argucias logró engatusar a una población crédula con una ayuda económica que jamás brindó. A él quizá se le olvidó el detallito, pero al pueblo, no. La estatua del comediante venido a cineasta es baldón y oprobio para un pueblo indignado al que se le engañó una vez, pero no permitirá otra burla por parte del intérprete de Eloy Gameno, cuyo mérito fue realizar sus películas con el apoyo del extinto FIDECINE.

Que el señor Derbez la piensa dos veces antes de engañar a una población, pus la gente ya no se traga el cuento de que es el non plus ultra del cine nacional. Que se la compre quien no lo conoce. Poco a poco el comediante pierde adeptos, solo por engañabobos. No es que se lo merezca, es que se lo ha ganado. Amor con amor se paga.


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