QUIÉN LE PREGUNTÓ
Por: Roberto Montoya Martínez.
ABRIL 6 DE 2024
Tirano disfrazado. Taimado, soflamero, idiota, altanero, estúpido, embustero. Se ha vuelto a equivocar. Esos insultos bien escogidos van dedicados a un afamado músico, que, para variar, metió la pata.
Primero, le endilgan que abusó de un menor de edad, luego, él le declaró la guerra al Reggaetón. Tiempo después se aplacó, para confesar en un podcast que cortejó a la que es su esposa cuando era menor de edad, cosa que en cualquier época se ve mal, y pidió respeto a su hijo, solo porque el mozalbete pidió en un convivio que pusieran rock alternativo, y cuyo fondo musical eran los corridos tumbados.
Era lógico que lo funaran. El colmo fue el haberse metido con la música de banda. No lo hubiera hecho, pues se echó de enemigos a la comunidad sinaloense. Sus declaraciones resultaron ser una afrenta a nuestro pueblo. Échense este trompo al’ uña.
Aleks Syntex la volvió a regar. El señor abrió el hocicote, diciendo que se debe regular la ejecución de la música de banda en lugares públicos. La pregunta es ¿qué le quita o que le da a ese imbécil? El ex actor infantil venido a músico, sigue en franco desafío en contra de la música popular.
Él considera que ese tipo de música debe estar regulado, siguiéndole el rollo al señor Ernesto Coppel. Encima de todo esto, se atreve a decirnos cavernícolas.
¿Así o más gilipollas (tonto)? Se necesita ser un retrasado mental, un analfabeta o un ignorante para tomar en cuenta lo que el señor sugiere. El acallar a las bandas en el puerto de Mazatlán, es tanto como enmudecer a los mariachis en Jalisco, destruir las marimbas chiapanecas, o de hacer volar al ángel de la independencia. Se nota que señor Syntex tiene déficit de atención, por eso se sube al tren del mame. Si nadie escucha su música ¿qué culpa tiene el huizache de haber nacido en el llano?
¿Quién le preguntó señor Syntex? Por principio de cuentas, nadie pidió su opinión, la cual nos importa una pura y dos con sal. Si de algo le sirve, se está viendo lo de la regulación para la ejecución de la música de banda en espacios abiertos.
Pero que eso no obste para que siga tirando su mala leche, musiquillo de café cantante. Antes lo respetaba porque sigue siendo un gran artista. Pero eso chato, ya se acabó.
No se pase de la lengua señor Syntex. Recuerde que, por la boca muere el pez. Tirano disfrazado. Viejillo entrometido. Traidor aborrecido. Tipejo reprimido. Ha vuelto a fracasar.
