El ministro francés de Sanidad, Olivier Véran, espera que el pico de contagios en esta tercera oleada epidémica que sufre el país se alcance en siete a diez días, aunque el número de enfermos en las ucis seguirá creciendo todavía un tiempo, hasta finales de abril.
Beaucoup de pays qui ont confiné cet hiver confinent quand même au printemps. A cause des variants. Concilier protection et libertés, c'est notre boussole. @franceinter pic.twitter.com/fDAshLyI2Z
— Olivier Véran (@olivierveran) April 1, 2021
En una entrevista a la emisora France Inter este jueves, después de los anuncios el miércoles por la noche del presidente, Emmanuel Macron, para la extensión de las reglas de confinamiento a toda Francia, Véran explicó que “hacen falta entre siete y diez días para que las medidas sean eficaces, para que se pueda evaluar su eficacia”.
Además, “si todo va bien”, se necesitarán otras dos semanas para que ese retroceso de las infecciones tenga su efecto en la disminución de los enfermos que están en las ucis, donde ahora hay 5 mil 53 pacientes, una cifra superior a la del pico de la segunda ola a mediados de noviembre.
El ministro se mostró convencido de que va a funcionar el nuevo régimen de restricciones que a partir del domingo se va a aplicar a todo el país, y no solo a los 19 departamentos con más incidencia de COVID-19.
Para ilustrarlo dijo que el pasado sábado el aumento de contagios en esos 19 departamentos fue únicamente del 1 por ciento, mientras en el resto del país la subida fue del 20 por ciento.
En la jornada del miércoles se comunicaron 59 mil 38 contaminaciones y 303 muertos en hospitales.
Las restricciones implican, en particular, la prohibición de todo desplazamiento más allá de un radio de 10 kilómetros en torno a su domicilio, salvo que haya una motivación válida, en particular laboral, familiar o sanitaria.
También van a tener que bajar la persiana en toda Francia los comercios que no se consideran esenciales y las escuelas y los colegios permanecerán cerrados entre tres y cuatro semanas a partir del sábado.
Véran indicó que con las previsiones del Gobierno, las restricciones que están en vigor desde finales de octubre, con todos los establecimientos de vida social clausurados (bares, restaurantes, cines, teatros, salas de espectáculos o gimnasios) deberían poderse levantar desde mediados de mayo.
En un horizonte más lejano dijo estar “convencido de que los franceses tendrán vacaciones este verano y que tendremos una vida próxima a la normalidad”, aunque se mostró cauto sobre si será posible hacer viajes al extranjero.