Escandaloso hecho en el que está metida la Fiscalía General de Sinaloa. Manipuló criminalmente la carpeta de investigación del homicidio del Mtro. Héctor Melesio Cuén Ojeda.
Ya había difundido la Fiscalía General de la República las graves inconsistencias en las que había incurrido la Fiscalía General de Sinaloa en la integración de la carpeta de investigación con motivo de la traición de Ismael Zambada García y el homicidio del Mtro. Héctor Melesio Cuén Ojeda.Demasiadas omisiones y fallas de fondo que hacen que la sospecha de encubrimiento y otros delitos cometidos por servidores públicos, tengan mayor solidez y que en la lupa de las autoridades federales no solo están la Exfiscal General Quiñonez Estrada, la actual Sánchez Kondo y el Vicefiscal General Dámaso Castro, entre otros no menos importantes.
Las omisiones, naturalmente, que no se les puede atribuir solo a los funcionarios de la Fiscalía estatal, sino que atendiendo principios de la lógica, también tienen conexión con funcionarios de alto nivel del gobierno del estado.
Las ordenes de aprehensión ya fueron solicitadas, pero por ahí se presentó un inconveniente en el sentido de que al parecer un Juez Federal afín a los mandos estatales negó a la Fiscalía de la Nación las ordenes de aprehensión solicitadas. Eso no quiere decir que los involucrados puedan quedar fuera de los alcances de la persecución federal o que sus fechorías queden impunes.
Lo dicho en la carta difundida por Ismael Zambada García, quedó demostrado que está apegada a la verdad y que la mención en ella del Gobernador Rocha Moya es un hilo de implicaciones de graves dimensiones… Los funcionarios de la Fiscalía estatal no actuaron solos. La exfiscal y en ese tiempo sus subordinados hicieron lo posible por ensuciar las investigaciones y recurrieron al montaje y que el dictamen médico forense no fuera elaborado conforme a los datos aportados por la necropsia del cadáver.
Una simulación ministerial que al final quedó al descubierto y los exhibió como autores de desviar el curso de la verdad en los hechos del veinticinco de julio pasado. La traición de Ismael Zambada García y el homicidio de Héctor Melesio Cuén Ojeda.
En los hechos, además de la traición y el homicidio mencionados, está también la desaparición de los escoltas de Ismael Zambada, entre ellos un elemento activo de la Policía de Investigación de la Fiscalía Estatal. El Gobierno del Estado está inmiscuido en la protección policial del Jefe del Cártel del Pacífico.
El escándalo impactó e hizo eco no solo en el Estado sino en todo el país y más allá de las fronteras mexicanas. Es cuestión de tiempo para conocer quienes están detrás de esos hechos y en la mira de la Fiscalía General de la República. Es cuestión de tiempo, esperar la ejecución de las ordenes de aprehensión solicitadas.
El gobierno del estado está en la mira crítica de la sociedad de Sinaloa, pero también en la de las autoridades federales, como la Presidencia de la República y el Partido de Regeneración Nacional, porque la violencia desatada en Sinaloa surge por la traición del veinticinco de julio y que muchos muertos y desaparecidos ha ocasionado. Preocupa a la presidenta Sheinbaum que Sinaloa y su gobierno estén arrodillados ante ese embate criminal.
Un escenario demasiado peligroso para el Gobernador Rubén Rocha Moya y el Senador Enrique Inzunza Cazarez.
La cortina de humo contra la Universidad Autónoma de Sinaloa, desde sus inicios fue burdamente planeada.
Se fraguó la traición, y también con quitar de en medio al Mtro. Héctor Melesio Cuén Ojeda ¿Cuándo en una semanera se dijo, que ahora que la UAS quedó sin protección, ahora quién los defenderá? El mensaje era inferente a la muerte de Cuén Ojeda? Los hechos parece que cobran forma.
La UAS no se toca, la autonomía universitaria se respeta.