Sin bienes materiales, amor de pareja ni actividad sexual desde los 30 años, fue declarado por científicos de la Universidad de Winsonsin como el “hombre más feliz del mundo”.
Hace años que los científicos de la Universidad de Wisconsin estudian el cerebro del Matthieu Ricard, doctor en biología molecular, monje budista en el monasterio Shechen Tennyi Dargyeling de Nepal y asesor personal del Dalái Lama, así como su traductor. Y están absolutamente fascinados con la mente de este francés de 74 años.
El secreto para llegar a la felicidad, guardado por muchos años, fue revelado por el budista llamado Matthieu Ricard. El monje budista francés y nepalés, que cambió la ciencia por la espiritualidad, habló sobre el entrenamiento mental que se necesita para ser feliz.
Ricard es un biólogo, investigador en genética, fotógrafo y monje budista que habla sobre la sencillez, la calma y la alegría de quien es feliz en todos los aspectos de su vida.
Los investigadores sometieron el cerebro Ricard a constantes resonancias magnéticas nucleares de hasta tres horas de duración.
Le conectaron a la cabeza hasta 256 sensores para detectar su nivel de estrés, irritabilidad, enfado, placer, satisfacción y otras decenas de sensaciones diferentes. Y lo mismo hicieron con cientos de voluntarios.
Los resultados obtenidos medían el nivel de felicidad de cada participante en una escala que iba desde el 0,3 (muy infeliz) hasta el -0,3 (muy feliz).
Matthieu Ricard logró nada menos que un -0,45, superando no sólo a todos los demás participantes sino los propios límites previstos en el estudio.
Y esto se explica, según dice, debido a que ha logrado traspasar las carencias, el sufrimiento y el negativismo que lleva a la mayoría de las personas a ser infelices.
Sin bienes materiales, amor de pareja ni actividad sexual desde los 30 años, fue analizado y declarado por científicos de la Universidad de Winsonsin como el “hombre más feliz del mundo”.
Y esto lo logra porque en su cerebro hay una gran actividad asociada al bienestar y las emociones positivas. Por cuatro décadas practica la contemplativa budista, vive en la India, Bután, Nepal, Tíbet, pero también recorre el mundo para promover proyectos humanitarios, el bienestar y la felicidad.
Desde 1989 es asesor del Dalai Lama y traductor de las enseñanzas budistas.
Ricard ha dicho que es importante el nivel de conciencia para lograr el manejo mental y por lo tanto concentrarte en las cosas buenas de la vida.
“Las emociones duran segundos, pero tenemos la tendencia a rumiarlas y su repetición crean estados de ánimo que después por acumulación llegan a convertirse en rasgos personales”, explicó.
Por eso propone cambiar la emoción o pensamiento negativo por uno positivo, para neutralizarlos. “No se trata de no enojarse ni ser pasivo frente a las injusticias sino de estar en un estado de bienestar y felicidad consciente sin ser dañino ni malévolo”.
La idea es no identificarse con la emoción y entender que uno no es la angustia ni la ansiedad, explicó.