EL CONSEJO ESTATAL DE SEGURIDAD PÚBLICA Y LA COORDINACIÓN GENERAL


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¿Será creíble el posicionamiento que difundió la Coordinación General del Consejo Estatal de Seguridad Pública el pasado 13 de enero?

Jueves 19 de enero de 2023.

Para responder a esa interrogante habría que resolver como ciudadanos si la representación ciudadana que conforma esa Coordinación General son realmente personas comprometidas con la ética, la institucionalidad y la moralidad con la que ejercen esa función.

Las instituciones policiales y la Universidad de la Policía prefieren no mencionarlas.

¿La actuación de quienes han pasado por la Coordinación General habrán o han actuado de manera libre e imparcial en la función que ejercen como representantes de la sociedad?

Habría que resolver lo sucedido en los diversos procesos para el nombramiento de Fiscal General del Estado. Una mancha que se ha convertido en tatuaje.

En todos los procesos, porque ha sido de sobra conocido, se ha filtrado de manera descarada el nombre de quien lleva la bendición de Dios, para recibir el nombramiento al final de una caricaturesca pasarela rodeada de insultante simulación.

Habrá que esperar que los señores legisladores reformen ese procedimiento y se asuma como facultad exclusiva del Congreso el nombramiento de Fiscal General, no obstante que se correría el mismo riesgo. La consulta popular podría ser otra opción.

La Coordinación General no ha sido una representación independiente, ha sido el instrumento del que se ha servido el gobierno para simular la legalidad de un proceso que nunca ha sido claro y transparente. El agua bendita se derrama mucho antes de que el favorecido llegue a la pila bautismal.

Por ese motivo, el posicionamiento mencionado habrá que verlo con la reserva que merece. ¿Se les presentó para su aprobación y publicación?

Porque su misión siempre ha estado subordinada a las políticas que se ejercen desde el Palacio de Gobierno. Muchos días pasaron para decidirse a manifestarse, muy tarde para los daños ocasionados.

No sería cuestionable si no fueran parte de la nómina del gobierno, porque como se dice coloquialmente el que paga manda. Sin embargo, para la integración de dicha Coordinación General sus miembros deberán ser designados por organizaciones civiles y educativas distintas del gobierno.

Pero la realidad es distinta, no se conoce quien participa en su nombramiento, si se hace de manera económica o a través de procesos púbicos para su elección.

Por tal motivo, habría que hacer una evaluación de cada uno de sus integrantes. Podrán ser ciudadanos honorables en su comportamiento personal, familiar, empresarial, profesional o en la docencia, pero esa honorabilidad se pierde al prestarse a procedimientos aparentemente transparentes, pero finalmente simulados.

Un manifiesto que no vale la pena analizarlo, porque no produce los efectos que la sociedad quiere.

Los cambios se podrían percibir cuando haya seriedad y compromiso social, que haya pertenencia en el servicio público que se presta, que haya voluntad plena para reconstruir el andamiaje destruido por las propias políticas gubernamentales que cada vez nos alejan de alcanzar la paz que mucho presumen en el discurso demagógico y falso.

Ese ha sido y seguirá siendo el discurso promotor de la inseguridad y la impunidad que padece la sociedad mexicana ¡Basta de falsedades! y pónganse a trabajar.

¿Usted qué opina?


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