La detención del “Nini” jefe de sicarios de la organización delictiva conocida como “los chapitos” y otros cómplices de dicho personaje, descubren, aunque no es novedad, complicidades desafiantes.
NOVIEMBRE 27 DE 2023.
Los culiacanazos dejaron una secuela de temor social por sus repercusiones en la seguridad colectiva y evidenció graves fallas en la reacción policial que evitaran todo tipo de daños en perjuicio de la población en general. No se ha dado a conocer si las fallas en la estrategia militar desarrollada fue producto de la sorpresa reactiva de los delincuentes o si fue deliberadamente desaseada por las autoridades que intervinieron. Lo cierto es que las operaciones policiales implementadas en las detenciones de Ovidio Guzmán y Néstor Isidro García o Néstor Ernesto Pérez Salas, se cometieron fallas que pusieron en riesgo la aprehensión de dichos forajidos.
Ha sido un tema muy recurrente en estos comentarios de opinión, ya que la falta de una corporación federal, estatales y municipales de seguridad pública, debidamente formadas y profesionalizadas, ha sido la consecuencia de que las fallas operativas en la prevención e investigación de los delitos no se logren concretar en apego a las formalidades exigidas por la ley.
No es atendible por tal motivo la inconformidad y enojo del Presidente de la República cuando dice que por tecnicismos de deje en libertad a delincuentes o que los bienes asegurados por el Ministerio Público al ser revisados por la autoridad judicial determine que dichas medidas precautorias al no haber cumplido con las formalidades legales se dejen sin efecto y que los bienes asegurados se regresen a sus dueños.
La seguridad pública y la investigación de los delitos no es un acto que formalmente deben ejercer las autoridades competentes constitucionalmente para llevarlos a cabo, también se requiere ineludiblemente que la autoridad en el ejercicio de esas funciones cumpla con el mandato de la ley, ya que de lo contrario los actos que se aparten de la legalidad deberán dejarse sin efectos y decretar la libertad de la o las personas detenidas o dejar sin efectos los aseguramientos realizados.
No es de lloriqueos Presidente, es una exigencia que debe cumplir toda autoridad y aunque no estemos de acuerdo en las decisiones judiciales que liberen a delincuentes o bienes asegurados, la culpa no es de los Jueces, solo será de esa autoridad incapaz para detener y asegurar bienes que después se dejen sin efectos por ilegales.
Quien podría dar explicaciones si con motivo de los Culiacanazos y de otra información notoria de las actividades ilícitas a las que se dedican algunas personas señaladas como autoras de delios que pudieran ser del fuero federal y también de delitos inobjetablemente del fuero común, no tengan carpetas de investigación por las autoridades del fuero común en Sinaloa.
Mucho se destacó en páginas periodísticas que el “Nini” fue un personaje señalado en la movilización criminal cuando los Culiacanazos. Se dijo también que en diversos momentos esa persona logró escaparse de la persecución policial hasta que finalmente fuera detenido el pasado 22 de noviembre.
Las inconsistencias en las actuaciones policiales ponen en riesgo detenciones de importancia superlativa ya que, con motivo de la detención de Néstor Isidro o Néstor Ernesto, no se hayan realizado con inmediatez las actuaciones de investigación obligatorias para evitar riesgos en la legalidad de la detención y en el aseguramiento de objetos del delito que ayudaran a reforzar esa detención. Después de la detención, se solicitó orden de cateo para revisar el domicilio donde fuera capturado dicho personaje, lo que quiere decir que no cumplieron con ese deber legal, y aun así, se queja el Presidente. La culpa no es de los Jueces.
¿La Fiscalía Estatal, porque no tenía carpeta de investigación en contra de Néstor Isidro o Néstor Ernesto, por temor o complicidad? ¿Así trabaja el gobierno del Estado en la investigación del delito? ¿Cuántos delitos habrá sin que tampoco se haya abierto carpeta de investigación? ¿en realidad fue una detención o una entrega?
No cabe duda de que las fallas en la seguridad pública y en procuración de justicia, seguirán permitiendo que los delincuentes sigan cometiendo delitos porque los titulares de las dependencias encargadas de combatir la criminalidad y la impunidad son nombrados para que simulen un trabajo que no realizan y que el Estado se siga hundiendo en el fango de la inseguridad.
La UAS no se toca, la autonomía universitaria se respeta.
¿Usted qué opina?