La investigación criminal sigue entretenida y distraída con sucesos de alto impacto. El grueso de los delitos continúa sin resolver.
Jueves 23 de diciembre de 2021.
La impunidad sigue siendo una constante en la inseguridad sinaloense. La autoridad sin rumbo y actuando en ruedas de prensa para aclarar hechos pasados. Se ve un Sinaloa desolado. No hay policía y los crímenes seguirán ocurriendo.
Por todos lados escuchamos que la Guardia Nacional patrulla, pero los delitos siguen ocurriendo. No hay informes de que es lo que se está haciendo para que las policías en los municipios se recompongan en los estados de fuerza. La Guardia Nacional no evitará los numerosos delitos que ocurren en el Estado.
Las estrategias de seguridad se tienen guardadas, si es que las hay. La policía estatal extorsionando en sus recorridos. Lejos de prevenir molestan al ciudadano. Sus comportamientos pueden ser porque carecen de viáticos para poder costear su estancia lejos de sus domicilios. ¿El presupuesto que se autoriza no contempla esas obligaciones o se gasta en otras cosas? Aun así, no es justificación para el abuso.
Los episodios delictivos continúan señor Gobernador. No hay funcionario en su administración que vigile el cumplimiento de las obligaciones en las áreas de seguridad pública y procuración de justicia. El malestar social continua. El secretario ejecutivo del sistema estatal de seguridad pública, perdido, sin saber qué recomendar para mejorar esas condiciones de inseguridad.
En cada episodio delictivo, parece que la detención del responsable de un delito se da por casualidad y no por investigaciones profesionales. Recordemos el hecho que escandalizó a los culiacanenses por una violación en el jardín botánico, se ordenó que se actuara de inmediato, pero hasta el momento el silencio prevalece. ¿Un hecho más impune? Los colectivos de mujeres se manifiestan decepcionados porque las investigaciones para resolver delitos contra mujeres no arriban a ninguna solución.
Diciembre es un mes que regularmente concentra a muchas personas que regresan a compartir con sus familias las fiestas navideñas y del año nuevo. Algunos tendrán cuentas por las que deban responder y surgen los ajustes de cuentas. Aparecen las armas y se producen los hechos violentos, porque no hay policía que detenga esos conflictos.
Policía señor Gobernador. No hay suficiente. Es el reclamo que se mantiene desde hace mucho tiempo y la necedad sigue prevaleciendo. La milicia policial se encargará de enfrentar la inseguridad mientras se prepara profesionalmente a la policía civil.
El mismo discurso replicado por varios gobiernos y la criminalidad creciendo. Parece que la complicidad se mantiene vigente. No atender ese reclamo permite al delincuente organizado y al que no lo está también para que trabaje tranquilamente sin que sea molestado.
La Universidad del Policía, está paralizada. En posible que haya nacido sin presupuesto. Los tiempos de espera son desesperantes porque mientras se deben estar formando nuevos policías, el delincuente está cometiendo nuevos delitos.
Esos episodios amargan la armonía familiar. Espantan la paz y la tranquilidad ciudadana. No se observan medidas que den confianza y esperanza social. Seguiremos viviendo en un estado de zozobra. Discursos políticos alentadores en opinión del gobierno. Pero en los hechos la policía chalineando y la investigación soñando.
¿Usted qué opina?