Los méritos deben ser reconocidos en todo su esplendor cuando un procedimiento es apegado a valores esenciales como la honestidad, la transparencia y la verdad.

NOVIEMBRE 10, 2021

La honestidad es un valor moral fundamental para entablar relaciones interpersonales basadas en la confianza, la sinceridad y el respeto mutuo. Es el concepto que debemos tener de cada uno de los y las ciudadanas de la Coordinación General del Consejo Estatal de Seguridad Pública.

Exprese mi total reconocimiento a la moral pública que guarda cada uno de los ciudadanos que integran el organismo responsable de llevar a cabo el proceso de nombramiento del o de la que será Fiscal General de Sinaloa.

No es la Coordinación General la que legitima el proceso sino los ciudadanos que nos registramos con el sano y único interés de llegar a tan digna representación pública en Sinaloa. Aportamos el esfuerzo para dar lo mejor de nosotros y convencer que éramos dignos de ocupar esa posición.

Quizá se opine que hay dolor en quien esto escribe, por el hecho de no haber formado parte de la quinteta entregada al Ejecutivo Estatal menos en la terna que llegó al Congreso del Estado.

En una especie de panegírico, mucho antes de iniciar el proceso formal, ya se mencionaba el nombre de una persona que podría ser la (femenino) Fiscal General de Sinaloa, ese comentario difundido a través de los diarios de la localidad, recibe en abono el realizado por el propio Gobernador cuando dice que el próximo Fiscal podría ser una mujer.

Somos personas maduras y responsables en todos los actos en que nos toca participar. No causa enojo si es hombre o mujer quien llegue a tener la responsabilidad de dirigir la institución del ministerio público en Sinaloa, los méritos deben ser reconocidos en todo su esplendor cuando un procedimiento es apegado a valores esenciales como la honestidad, la transparencia y la verdad.

Los miembros de la Coordinación General, para que su función sea reconocida y aplaudida, debieron anteponer al interés personal el valor superior de que el Estado cuente con funcionarios públicos honestos y con capacidad plena de que sabrán cumplir con la función pública que les será conferida.

Por tal motivo, en la conciencia de los legisladores deposito como ciudadano la conveniencia de reformar la Constitución local y la ley respectiva, para que el procedimiento de elección de Fiscal General de Sinaloa, quede en manos del Congreso Estatal, y partir de la premisa de que es ahí donde tenemos la representación popular genuina por voto popular y no un organismo de ciudadanos donde la sociedad no participa en su designación.

Recibí una llamada telefónica, en la que me decían que próximamente el Coordinador General de dicho organismo ciudadano, recibiría la distinción de nombrarlo como Secretario Ejecutivo del Consejo Estatal de Seguridad Pública.

De ser cierta la información, la probidad del proceso y la transparencia del mismo, sigue recibiendo abonos de duda. Que lamentable que ciudadanos de bien, exijan a los comparecientes en el proceso de nombramiento del Fiscal, no solo conocimientos en el tema penal y de seguridad pública, sino honestidad plena y principios éticos debidamente probados en la opinión social.

¿Por el compromiso cumplido, Ricardo Jenny del Rincón, recibirá próximamente su premio de recompensa?

¿Usted qué opina?