CONTIGO NI A MISA PORQUE ME REGAÑA EL PADRE
Por: Roberto Montoya Martínez
Jueves 4 de agosto de 2022.
Se va a desatar la madre de todas las batallas dentro de TV Azteca, pues una de sus altas ejecutivas se bajó del tranvía sin decir agua va. Dejando al canal sin rumbo. Vaya que les hizo un bonito regalo de cumpleaños. Algo ha de haber ocurrido para que esa persona se fuera como burro sin mecate. Unos dicen que por falta de resultados, otros por razones de pesos, el hecho es que esta culta dama se fue pa’l gabacho, de donde nunca debió salir. Échense este trompo al’ uña.
Sandra Smester dio por terminado su ciclo en Azteca el pasado 1° de agosto, justo cuando la cadena está celebrando 29 años como corporativo de medios. Cansada de que lechen la culpa de los fracasos de la televisora, optó por aceptar la oferta que le hizo Telemundo, donde espera si valoren su trabajo.
Ella llegó al Ajusco en 2017 de la mano del finado Alberto Ciurana, de quien heredó el cargo que hasta hace poco ostentaba. Sus ideas revolucionarias y manchadas no terminaron de convencer al público, que se sintió despojado al saber que Azteca nunca más iba a transmitir telenovelas originales.
En ese tenor la empresa metió la pata, pues justamente las telenovelas le están partiendo el queso a sus realitys que ya hasta da pereza verlos.
El detrimento y desgaste de conceptos tales como EXATLÓN, SURVIVOR y MASTER CHEF terminaron por hartar a la audiencia. Y de eso tiene la culpa Sandra Smester, que nunca terminó de entender al público mexicano, todo por seguir la escuelita de su mentor y jefe Alberto Ciurana, que se ha de estar revolcando en su tumba, ya que presiente que la Chapoy le va a ganar la partida.
Y todo pinta para que así sea. Si no queda ella como vicepresidenta de contenidos, al menos dejará a uno de sus testaferros para que vuelva a atiborrar la parrilla de programación con shows como LOS 25 MÁS, LA HISTORIA DETRÁS DEL MITO y emisiones de similar manufactura. La encargada del estudio de espectáculos de Azteca pudo decir: ¡Se hizo justicia!
Sandra Smester le dijo a Benjamín Salinas: contigo ni a misa, porque me regaña el padre. No conforme la miseria que le daban, le colgaban los fracasos que ha tenido el canal. Ante ese escenario, fue lo mejor que ella se fuera.
Aunque ambos se despidieron cordialmente en Twitter, en el fondo se dedican mutuamente sus peores maldiciones. En cierto modo, es una pena que TV Azteca no haya sabido valorar la experiencia de la entenada de Ciurana, pero ella también tuvo la culpa por seguirle el rollo a los Salinas.
Que se cuiden los viudos de Ciurana, pues sus cabezas tarde o temprano van a rodar. Y quien promoverá su caída será la señora Paty Chapoy, que no descansará hasta recuperar el lugar que le quitaron. El estar a la diestra de Ricardo salinas. La venganza es un plato que se sirve frío.
