VENI VIDI VICI 3° PARTE
Por: Roberto Montoya Martínez
La plática de Federico es por demás agradable. No tuvo empacho en conversar sobre su hoja de servicio. Estuvo otros 10 años en Radiorama, también estuvo en Direct TV, Radio Resultados y Multimedios.
La pandemia no solo puso en jaque a Federico, sino que también mostró una nueva área de oportunidad. Abrió Heraldo Radio Culiacán.
Solo bastó un año para posicionarla, hasta que la gente de allá arriba le dijo. Se acabó el corrido. Y con profundo dolor tuvo que cerrar operaciones de la emisora, de la cual dependían 10 personas, siendo su principal sustento económico. Dejemos que este comunicador nos platique como terminó este drama.
ANTE TODO, LA LIBERTAD DE EXPRESIÓN
“No tuvimos más remedio que acatar las disposiciones de la gente de arriba. Tuvimos que bajar la cortina. Habíamos construido mucho. Se estaba vendiendo bien a pesar de ser una estación permisionada.
Nuestra apuesta era vender contenidos, sin necesidad de sacrificar los ideales, y sobre todo, la libertad de expresión, jamás ejercimos la censura porque no va con los principios de esta empresa. Nunca comprometimos el micrófono al servicio de X o y personaje.
Comprendemos que en defensa de la libertad de expresión, debemos dar voz a todos y eso fue lo que hicimos. Ante nuestra radiodifusora desfilaron todo tipo de personajes: políticos, empresarios, comunicadores, emprendedores, empresarios y hasta gente común, hicieron uso del derecho a la libre expresión.
Nuestra estrategia fue emplear el llamado CONTENT MARKETING, el cual tiene más impacto que un comercial cualquiera y sería más recordable el paso por los micrófonos de los ejemplos que te acabo de dar. Todo eso se acompañó a través de entrevistas, cápsulas y reportajes que le daban un valor agregado a quien quisiera anunciarse con nosotros. Los contenidos al servicio de fortalecer las imágenes de las marcas, los personajes, las empresas o las instituciones”.
AHORA NOS VAMOS PA’L NORTE
“Lo antes dicho nos trajo a este día, en que estamos cerrando el changarro, aceptando otro reto. Continúo en la empresa, pero ahora mi brújula apunta hacia Monterrey, Nuevo León, donde están establecidas dos estaciones de la empresa: Heraldo Radio y Ke Buena.
Me haré cargo de la comercialización de las estaciones, pero en particular enfocaré mis esfuerzos en Ke Buena, que es una emisora de corte regional mexicana, sin descuidar las demás plataformas, que son Televisión, Prensa Escrita y Plataformas Digitales.
Yo me quise quedar, pero los de arriba son los que mandan, y ante la falta de parque, abandono la plaza. Cambio de aires, de plaza, de formato. Eso no es nada nuevo para mí. Ni hablar. Arriba y adelante”.
ME VOY, PERO NO ME VOY
“Me cambio de sede. Mudo mi base de operaciones, cosa que me aleja más de mis hijas que radican en Los Cabos con su madre.
Pero al menos solo un avión hay de distancia entre los tres. Pero no solo me aparto de ellas, sino también de gente a quien estimo y respeto, entre los cuales te cuentas tú amigo Montoya, Angélica Rodríguez, con quien sostengo una relación de orden sentimental, y cuya separación se me va a hacer cuesta arriba, pero es algo que tengo que superar.
Aparte de ustedes, dejó con mi marcha a buenos y grandes amigos en Culiacán, que me ofrecieron su mano y su amistad para permitirme crecer con ellos, aprender y sobre todo, que me acompañaron en este viaje que aquí termina.
Citando una de tus frases hechas amigo, no es el fin de una etapa, es el inicio de otra diferente. Por eso y muchas cosas más, gracias Culiacán, gracias Sinaloa. Nunca los voy a olvidar”.
CAMINANTE NO HAY CAMINO
“Me considero un caminante apasionado, de esa forma conozco las calles, los lugares, las personas. Todos esos recorridos los he hecho a pie.
Puedo ufanarme de que caminé varias veces por Las Riberas. He recorrido ese trecho infinidad de ocasiones. He recorrido Culiacán mochila al hombro por sus calles.
Desde el centro de la ciudad hasta la periferia. He practicado el senderismo, y al modo de Sócrates, pienso mientras camino. Sigo la escuela peripatética, donde los pensamientos surgían en lo que uno daba una caminata.
En la calle puedes encontrarte a muchos maestros de quienes puedes aprender algo, eso yo lo viví y lo sigo viviendo.
Ahora que me cambio de residencia, tendré que caminar sobre una fundidora. Monterrey es una ciudad muy grande como para recorrerla a pie, pero eso no será impedimento. Ando buscando a un equipo de senderistas para recorrer el cerro de la silla, y cerros similares, el chiste es no perder esta buena costumbre.
Nosotros vamos caminando en esto de la comunicación, de la inspiración, de la literatura y de la radio. Ahora nos tocará en suerte caminar por otros senderos, en otros lugares, en otros caminos. Eso será en la sultana del Norte”.
Federico Cánovas vino, vio y venció. De este hombre hay que aprender, ya que cada vez que sufre un revés no lo considera un fracaso, sino un a experiencia.
Tuvo que sufrir para aprender. Ahora que se abre ante él otra oportunidad de hacer radio, estamos seguros que pondrá en juego Experiencia, sabiduría y sobre todo corazón, ese mismo corazón que deja ahora en toda la raza de Culiacán que lo va a echar de menos.
Cabalga quijote. Cabalga. Ve, mira y vence. En lo personal, no perdí un jefe, gané un amigo. Que haya suerte…..y algo más.
