Tomateros de Culiacán volvió a zona de calificación; Sultanes de Monterrey es su rival directo, por ahora
= Serie difícil a partir de este martes: Charros de Jalisco
= Cambiantes circunstancias en esta segunda vuelta
= Por hoy: ¡cinco empatados en el segundo lugar!
= Anthony Vázquez, el quinto mejor pitcher de la Liga
= A seguir de cerca la serie Monterrey-Yaquis de Obregón
Jorge Luis Telles Salazar
Tomateros de Culiacán regresó a zona de calificación al rescatar la última de sus series en el estadio de los Algodoneros de Guasave. Si la temporada regular, en efecto, hubiese concluido anoche, el equipo guinda estaría dentro de los “play offs” de la campaña 21-22 de la Liga Mexicana del Pacífico, con una cosecha de diez puntos y medio, contra diez de los Sultanes de Monterrey y solo siete de los Cañeros de los Mochis.
Claro, no es esto lo que los aficionados de casa esperaban del plantel bicampeón; pero, bueno, el primer objetivo de todos es avanzar a postemporada, habida cuenta de que ahí, en esa fase de la campaña, todo comienza a partir de cero y algunos de los equipos participantes experimentan un cambio radical.
Precísamente, es el caso de los Tomateros de Culiacán, que son unos durante el calendario regular y otros, totalmente diferentes, en el arranque mismo de los “play offs”.
Y bien.
Insistimos: en estos momentos, el equipo guinda está ubicado en la zona de calificación; pero con una magra delantera sobre su rival directo en esta tarea, como lo son los Sultanes de Monterrey. Las circunstancias, sin embargo, alcanzan niveles de volatilidad tan altos, que las cosas pueden cambiar de un momento a otro. Y si Culiacán está hoy como protagonista de postemporada, mañana bien le puede ceder su sitio a los Sultanes de Monterrey.
Hay que ser muy claros en este punto: para que Tomateros califique a “play offs” deberá mantenerse siempre por arriba de Cañeros de los Mochis y Sultanes de Monterrey.
En lo que hace a los Cañeros, esto ya parece como un hecho, si tomamos en cuenta el decepcionante papel del equipo verde en la campaña actual -y ya irían dos al hilo – de tal modo que Mochis está prácticamente eliminado. No se ve por donde: para desplazar a Culiacán, los Cañeros tendrían que dar un salto fenomenal en la tabla de posiciones, lo que se ve como muy poco probable en lo que resta de la campaña.
Los Sultanes de Monterrey, en cambio, si son un problema, aunque para echar fuera a los bicampeones requerirían, por lo menos, finalizar la segunda vuelta dos sitios arriba de los Tomateros de Culiacán. Difícil sí; pero no imposible. Sultanes finalizó séptimo el giro inicial y es exactamente el mismo lugar que ocupa en la actualidad.
Ahora que esta hipótesis, amigos aficionados, no es la única que llevaría a Tomateros a postemporada. Hay que dejarlo bien claro. No nos equivoquemos. Ni mucho menos nos enredemos.
Si Culiacán no quiere verse envuelto en este tipo de combinaciones, conjeturas o explicaciones, le bastaría, sencillamente, con repetir el quinto sitio de la primera vuelta, lo cual se convertiría en doce unidades y con esto sería más que suficiente, para calificar, sin importar lo que hagan o dejen de hacer el resto de los equipos participantes.
Dicho de un modo más fácil: lo que Tomateros ocupa es recuperar su ritmo triunfador. Comenzar a ganar series con más frecuencia y ubicar por encima de los .500 su porcentaje en juegos ganados y perdidos. Ese es el camino. No hay otro.
Y Culiacán lo puede hacer, por supuesto. Es bicampeón y un buen team. De lo mejor de la Liga. Atraviesa, cierto, por un mal momento; pero esto es común en el beisbol. Las rechas malas y las buenas son algo completamente normal. La temporada regular concluye el 23 de diciembre y de aquí a entonces seguramente los Tomateros tendrán la calificación en el bolsillo.
Ya lo verá usted.
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Y bueno.
Con eso de que a Tomateros le urge recuperar su ritmo ganador, bien vale la pena reiterarle al amigo aficionado que su rival en turno -el de este martes, aquí en Culiacán – son los Charros de Jalisco, equipo que, por ahora, no anda nada bien; pero que, no corre el riesgo de la eliminación.
El club de Guadalajara, efectivamente, cosechó 8 puntos en la primera vuelta y eso es sinónimo de calificación a “play off” aunque no una garantía al cien por ciento. En la actualidad, los tapatíos están en el penúltimo sitio, con apenas 6 victorias en 14 partidos.
La producción de unidades de la primera vuelta constituye, ciertamente, su mejor protección y su objetivo inmediato es aportar su granito de harina para la eliminación de los campeones de la Liga.
Jalisco llega a Culiacán por segunda vez en la temporada con un equipo muy parecido al de los últimos años, que se basó, usted debe recordarlo, en el roster de los Algodoneros de Guasave, cuando se fueron del circuito.
El infield, por lo menos, es el mismo de varias temporadas atrás, con Japhet Amador, en la primera base; Manny Rodríguez, en la segunda; Agustín Murillo, en la tercera y Amadeo Zazueta, en el campo corto, mientras que en los jardines sobresalen Dariel Alvarez, Félix Pérez y Julián Ornelas, quien es, por cierto, su mejor artillero, con porcentaje de .308.
En el pitcheo, Javier Solano es su mejor carta, con saldo de 3-4 y 4. 92. Ahí también: Felipe Arredondo, Manuel Flores y Roberto Osuna, su figura estelar.
Buen equipo.
Algo le ha fallado al plantel de Roberto Vizcarra para que estén hoy donde están, aunque, subrayamos, con boleto a “play offs”, comprado con toda anticipación.
Tomateros de Culiacán, por su parte, regresa a casa sin cambios mayores -salvo los movimientos naturales del roster, previstos por la Liga -; pero con el ánimo muy en alto, tras doblegar a los Algodoneros de Guasave en el mismo “Kuroda Park”. Era imperativo ganar esa serie y la ganó Culiacán. Ahora es de vital importancia hacer esto aquí en casa, contra los Charros de Jalisco.
Insistimos: sin grandes movimientos en su roster.
Un roster, con tres peloteros por encima de los .300, considerados los turnos oficiales exigidos por la Liga: Efrén Navarro, con .329, como el quinto mejor bateador del circuito, seguido por Sebastián Elizalde, con .307 y Dairon Blanco, con .303. Por ahí cerca, Fabián Meneses, con .283; Emmanuel Avila, con .271 y Ramiro Peña, con .259.
En lo que hace al pitcheo, dos Tomateros dentro de los mejores cinco del circuito: Anthony Vázquez, invicto, con 4-0 y 2. 14 en carreras limpias admitidas y José Luis Bravo, con 2-0 y 2. 29 de efectividad.
Será una serie fieramente disputada. De esto no tenemos duda alguna.
Por allá nos vemos. En el estadio de la Nación Guinda.
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Para finalizar.
Aquí el resto de la actividad en esta nueva fecha de la temporada 21-22 de la Liga Mexicana del Pacífico:
Yaquis de Obregón en Monterrey.
Naranjeros de Hermosillo en Mexicali.
Algodoneros de Guasave en Mazatlán.
Y Cañeros de los Mochis en Navojoa.
A seguir de cerca lo que suceda en la capital de Nuevo León: por ahora, los Sultanes de Monterrey son el rival directo de Tomateros en la contienda por la clasificación.
Y un detalle adicional: no perder de vista que hay cinco equipos -si ¡cinco! – empatado en el segundo sitio de la tabla, con marca de 8 victorias y 7 derrotas. O sea que esto cambiará todos los días, sin duda.
Y por hoy hasta aquí. Ya nos vamos. Cuídense mucho y que Dios los bendiga. Ahora y siempre.
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