El Químico Benítez Torres, era un estorbo para Rocha Moya, ya que su actitud beligerante molestaba incluso a la dirigencia nacional de MORENA.
Luis Guillermo Benítez Torres, Es Presidente Municipal de Mazatlán por el Partido Sinaloense.
Quiso desconocer la candidatura de Rubén Rocha Moya al Gobierno de Sinaloa y ante la imposibilidad de obtenerla conviene hacer alianza con los partidos políticos PAS-MORENA para reelegirse en la Presidencia Municipal de Mazatlán.
La alianza era un hecho, ya que el Presidente del Partido Sinaloense, Héctor Melesio Cuén Ojeda, cerraba la alianza con MORENA para ir en candidatura común con Rubén Rocha Moya al Gobierno de Sinaloa.
Quitar toda intromisión política a Rocha Moya era un imperativo para no entorpecer el triunfo del candidato común a la gubernatura de Sinaloa por MORENA-PAS. El Químico Benítez Torres, era un estorbo para Rocha Moya, ya que su actitud beligerante molestaba incluso a la dirigencia nacional de MORENA.
La negociación política con Luis Guillermo Benítez fue para que participara bajo las siglas de un partido político distinto a MORENA porque la cuota de género, en el proceso electoral, no le permitía que lo abanderara su propio partido. El PAS le aportó la solución.
Benítez Torres, lo dije, su único valor, es que sus simpatizantes lo consideran un político honesto, aunque sus habilidades para administrar el municipio dejaran mucho que desear por su nula rentabilidad de su primer periodo al frente de la administración municipal. Aún así, Cuén Ojeda se la jugó y finalmente ganó.
No hay que alucinar como sucede con Benítez Torres. Al no reconocer que su triunfo se lo debe al Partido Sinaloense es una deslealtad sin nombre. Gobernar al municipio de Mazatlán por una reelección, no fue por sus simpatías políticas sino por los votos del Partido Sinaloense que lo postuló para ganar. En MORENA no querían si oír su nombre.
Héctor Melesio Cuén Ojeda sacrificó su aspiración al gobierno de Sinaloa, para hacer ganar la fórmula MORENA-PAS con Rocha Moya al gobierno de Sinaloa. La ganancia del PAS en Mazatlán sería el Cabildo, así como la Secretaría del Ayuntamiento, la Tesorería y la Oficialía Mayor del Municipio.
Benítez Torres, es desleal y falso. Desleal al Partido Político que lo abanderó y falso porque los acuerdos pactados, perversamente los desconoció una vez sentado en la silla municipal, manteniendo en riesgo la gobernabilidad del municipio. Tiene en su contra un Cabildo que no es de su partido y pretende victimizarse señalando al PAS como el causante de la inestabilidad política del municipio.
Benítez Torres recurre a la diatriba y hace uso de la revuelta popular, llevando al edifico municipal a sus simpatizantes y con agoreras provocaciones amedrentan a los regidores pasistas que el Ayuntamiento no es la UAS y que tampoco impondrán sus condiciones en la integración de la administración municipal.
Es perverso, porque culpa de la falta de acuerdos a Cuén Ojeda. Lo hace porque sabe que ya no tiene la dirección del Partido Sinaloense. El Cabildo Mazatleco está en lo correcto porque la legalidad está de su parte. Benítez Torres, deberá deponer su actitud beligerante y sentarse a dialogar para resolver la crisis política que él mismo ha propiciado en perjuicio de la gobernabilidad de Mazatlán.
Su animadversión a Rocha Moya que ahora gobierna Sinaloa, no lo deja en paz, y recurre al escándalo para encubrir su encono tratando de descalificar al PAS, porque tampoco lo podrá lograr. El Congreso del Estado deberá actuar y ya. El conflicto no debe continuar. El Químico Benítez, en su casa debería estar.
¿Usted qué opina?
