El presidente Andrés Manuel López Obrador envió al Senado de la Repú
blica una iniciativa de reforma a la Ley del Poder Judicial de la Federación.
En su conferencia matutina aseguró que “no hay nada especial” en la iniciativa, toda vez que la reforma ya aprobada en 2020 tiene como objetivo garantizar la autonomía e independencia del Poder Judicial, mejorar su funcionamiento “y sobre todo combatir la corrupción”.
La iniciativa enviada por el Ejecutivo Federal recoge la propuesta de reforma integral a la estructura orgánica orgánica y los procedimientos que realiza, elaborada por el propio Poder Judicial de la Federación.
Busca incorporar y desarrollar en la legislación secundaria cambios constitucionales para concretar una reforma integral de largo alcance.
La nueva Ley Orgánica del Poder Judicial de la Federación contempla un esquema sancionatorio del nepotismo al interior de tal órgano así como para la causal de responsabilidad de acoso sexual.
También contiene una actualización de las facultades de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) para oficializar entre sus atribuciones revisar de oficio la constitucionalidad y validez de los decretos expedidos por el Ejecutivo Federal durante la restricción o suspensión de derechos y garantías.
De igual forma, la SCJN podrá resolver la constitucionalidad de la materia de las consultas populares o resolver el recurso de revisión en materia de seguridad nacional para efectos de acceso a la información pública.
Se garantiza que la administración de la Suprema Corte corresponderá a su presidente, ministro que tendrá la atribución de reglamentar las áreas administrativas en general, realizar los nombramientos correspondientes y apoyar su gestión en los comités de ministros que designe.