“La aprobación de la reforma a la Ley del del Seguro Social cumple el pago de una deuda histórica con las y los trabajadores y confirma que el Sistema de Ahorro para el Retiro es el mecanismo idóneo para administrar su ahorro”.

La reforma originalmente propuesta por el sector privado contenía medidas que no representaban un costo fiscal para el gobierno y permitían alcanzar mejores niveles de inclusión social (pensiones para profesionales independientes), equidad de género y ahorro voluntario para los trabajadores, destacó Amafore, que encabeza Bernardo González.

“Desafortunadamente, estos elementos no fueron tomados en cuenta en la redacción final de la reforma y quedarán como pendiente en el compromiso por mejorar continuamente las pensiones de los mexicanos”.

La asociación, que integra a 10 afores, reiteró su compromiso con la disminución progresiva de las comisiones y dejó en claro que la posibilidad de establecer controles de precios máximos vulnera la competencia en la industria y, por tanto, actúa en detrimento de los ahorros de los trabajadores, como ha sido señalado por organismos autónomos independientes (específicamente, la Comisión Federal de Competencia Económica), expertos, e incluso los reguladores del sistema.

“Además de que transgrede la legalidad en materia de competencia y los tratados internacionales que protegen la inversión en México”.

La reforma aprobó supeditar las comisiones que se cobran en México (actualmente en 0.92 por ciento) a lo que se cobra en Estados Unidos, Colombia y Chile (0.54 por ciento, en promedio), cuando el compromiso original era disminuirlas a 0.70 por ciento para 2024.

Esta situación va a provocar el cierre de algunas afores, sobre todo las que administran recursos en menor cantidad, señaló González recientemente.

No obstante, Abraham Vela, presidente de la Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro (Consar), consideró que las afores tienen margen para reducir estas tarifas, sin afectar su operación.