Claudia Sheinbaum, reveló el proyecto Olinia, que construirá vehículos eléctricos 100 por ciento mexicanos.
Enero 6, 2025
El Gobierno de México lanzó Olinia, primera armadora mexicana de mini vehículos eléctricos, que para finales del sexenio se espera que fabrique tres modelos con precios que van de los 90 mil a los 150 mil pesos.
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, quien desde el inicio de su sexenio presentó los 100 compromisos de su gobierno, destacó el Olinia como un proyecto clave para impulsar la innovación tecnológica en el país.
En su discurso, subrayó que este auto será “100% diseñado por jóvenes mexicanos y mexicanas y ensamblado totalmente en nuestro país”, lo que refuerza el objetivo de fomentar la manufactura nacional y el talento juvenil en el sector automotriz.
El nombre Olinia, que en náhuatl significa “moverse”, resuena con la visión de un vehículo diseñado para satisfacer las necesidades de movilidad urbana de manera ecológica y eficiente. A diferencia de los autos eléctricos de mayor tamaño y precio en el mercado, como el Tesla Model 3, cuyo precio comienza alrededor de los 35 mil dólares (más de 600 mil pesos), el Olinia será una opción más pequeña, con un tamaño cercano al de una motocicleta, pero con mayores niveles de seguridad.
El precio estimado del Olinia se prevé entre los 20 mil y 30 mil dólares (aproximadamente entre 360 mil y 540 mil pesos), lo que lo convertiría en una alternativa competitiva frente a los vehículos eléctricos de marcas internacionales. Este rango de precios lo posiciona como un auto de acceso popular, ideal para quienes buscan ingresar al mercado de la movilidad eléctrica sin el alto costo asociado a marcas premium.
Entre las principales características del Olinia destacan su autonomía competitiva y su infraestructura de carga adaptada a las necesidades locales. Este enfoque responde a la creciente demanda de vehículos más sostenibles, pero con características que se ajusten al entorno y al poder adquisitivo de la región.
El Olinia se presenta como una oportunidad única para que México se posicione como un referente en la producción de autos eléctricos accesibles, promoviendo no solo la movilidad sustentable, sino también el desarrollo tecnológico y la creación de empleos en el país.