El gobierno federal se muestra insensible ante la ola violenta que descalabra a Sinaloa. El temor quebranta fortalezas y el olor a sangre causa nauseas.
OCTUBRE 18 DE 2024
Los sinaloenses viven aterrados y en un estado de sitio. Culiacán, la capital de Sinaloa, se ha convertido en el tapete verde de los grupos en conflicto. Ayer en el quinto aniversario del primer culiacanazo soltaron su desenfreno. Enfrentamientos y muertos en los alrededores de Culiacán y desfiles de civiles armados por la ciudad.
La noche fue larga para la policía y los soldados porque no los dejaron dormir. Los grupos delictivos operaron por todos los flancos de la ciudad y del municipio. El temor general volvió a sentirse y el coraje ciudadano ya no se puede contener. Los helicópteros castrenses no han parado de volar.
¿Una burla o un desprecio a la seguridad general de la población? La gente escondiéndose de no toparse con los grupos criminales y refugiándose en sus casas, y el Gobernador llamando a la gente para que asistiera a la inauguración del festival cultural de Sinaloa. Le llovieron críticas y el desprecio por su insensibilidad política y deberes ciudadanos.
¿Que espera el gobierno federal que no pone orden? La Fiscalía General de la República debe tener buenos avances de las causas que dieron lugar a la traición que tiene arrodillado a Sinaloa. Los grupos criminales no cederán en tanto no tengan al o a los causantes de esa traición. El veinticinco de julio es una fecha que no olvidarán.
Si el gobierno ha perdido su autoridad ante esta ola criminal ¿qué espera el gobierno federal para remediarlo? debe hacer una evaluación urgente para que se tomen las decisiones que pongan orden en la entidad. El tiempo transcurre y la situación se agrava.
Patrullas con sirena abierta anuncian peligro por donde pasan, y la gente que lo observa le surge el temor interior, mejor se calla y se pone a rezar. No Gobernador, la gente no puede estar tranquila ante tantos grupos civiles armados.
¿Quién traicionó a Ismael Zambada no dimensionó lo que ocasionaría? ¿El gobierno mexicano no tuvo la capacidad para la detención o no lo hizo por los grandes compromisos que tenía celebrados con el capo detenido? ¿Por eso se recurrió a la traición? ¿hay un circulo de poder político en Sinaloa que cauce malestar a alguna de las facciones en conflicto?
Hipótesis hay muchas. El poder bélico de los grupos organizados delincuenciales es altamente peligroso. El gobierno se comprometió con algunos de sus dirigentes y ahora las consecuencias parece que el pueblo las tendrá que pagar.
El comercio siente el fragor de la ausencia de clientela, bajó considerablemente el consumo y empiezan a quebrar, pero esa preocupación no le importa al gobierno, sino vean a esos cínicos favorecidos con el ropaje de diputados que patalean como si fueran los estertores de la muerte, porque saben que la Ley Feliciano no se aplicará en la UAS.
Mientras tanto que el pueblo sufra y se defienda como pueda y esos diputados que se entretengan con su dulce de pirinola.
Presidenta Sheinbaum, Sinaloa no está tranquilo ¿La violencia ha ocasionado demasiados perjuicios, demasiadas muertes y desaparecidos en poco tiempo, escuelas cerradas y comercios en quiebra, porqué olvidó a un pueblo que la apoyó?
La UAS no se toca, la autonomía universitaria se respeta.
